Hoy entrevistamos a Lisa Aidan, autora de Y sin querer, Corazón de repuesto o Loco por Becca. Su último trabajo es Tras el largo viaje.
¿Desde cuando escribes?
Ante esta pregunta siempre me veo obligada a matizar. Me gusta escribir, de siempre. Desde que era pequeña y descubrí la grafía de las letras, es algo que me encanta y ya entonces soñaba con escribir cuentos, historietas gráficas (aunque soy pésima dibujando) y demás. La poesía, la escritura de ideas, de notas, de cosas que me removían, siempre ha estado ahí, acompañándome a diario por donde fuera que la vida me llevara. Con trece años quise comenzar una novela aprovechando que un profesor me prestó su máquina de escribir, porque tal era mi pasión, y quedó a medias; no me gustaba, no podía expresar lo que yo quería plasmar. Ahí quedó, en el pasado. No fue hasta muchos años después que comencé otra. En el correr de los años continué con relatos y poemas varios. Fue escribiendo esa obra que, por la casuística de ese momento de mi vida, me descubrieron creando. Yo, que nunca había dicho nada acerca de mis textos, que los guardaba con recelo porque era algo tan íntimo para mí… No supe qué excusa poner para que no se le echara un vistazo. La sorpresa vino al minuto siguiente cuando, lejos de reírse de mí o de menospreciar lo que hacía, me vi animada a continuar, a mostrarlo al mundo. Y varios años después, aquí estamos.
¿Editorial o autopublicación?
No descubro nada nuevo, aquellos que me conocen o con los que hemos debatido el tema saben lo que opino, creo que el futuro para los autores está en ser híbridos; es decir, una mezcla de ambos mundos. Publicar con editorial tiene unas ventajas y unos inconvenientes y autopublicar otros. Los dos mundos requieren de un gran esfuerzo y dedicación, de un enorme respeto y de una competencia que, en ocasiones, debería estar más regulada. Lo que importa en cualquiera de los dos casos, y siempre a mi parecer, es que amemos la literatura, que la mimemos y la respetemos. No se hace mejor literatura por escribir uno u otro género, ni se escribe mejor por tener más o menos seguidores, followers o como sea que se llamen en un futuro. La literatura no entiende de egos, ni de ventas, la literatura es y será siempre por y para aquellos que la aman, la respetan y la valoran.
¿Crees que las nuevas tecnologías ayudan al escritor novel o acaban entorpeciendo al generar tanta competencia?
Creo que más que las nuevas tecnologías ha sido la crisis la que ha hecho que muchas personas de diferentes ámbitos y sexos hayan decidido «probar suerte», «sacar un extra» o «escribir esa historia que siempre quise» y ahí está el error y la base del problema literario actual; que, por otra parte, no es nada nuevo y venimos arrastrando hace años, pero que ahora ha empeorado. El problema no es que lo hagan, es que hay muy poco respeto por una profesión ya maltratada en origen y eso solo incrementa que se tire aún más por tierra el trabajo de tantos profesionales del sector.
¿Cuáles son tus autores favoritos?
Uff, tengo varios. No te quiero aburrir, pero ahí van unos cuantos: Julio Verne, Edgar Allan Poe, Elisabeth Gaskell, Kathleen Wodiwiss, Johanna Lindsey, Nora Roberts y su seudónimo J.D. Robb, Conan Doyle, Agatha Christie, Neruda, Ursula Le Guin, Lovecraft… Como veis soy muy ecléctica. No me quiero dejar algunas de las actuales: Marian Keyes, Raquel G. Estruch, Suzzane Collins, Caroline March, J. K Rowling, Sophie Kinsella, Felicidad Ramos…
¿En qué te inspiras para crear a tus personajes?
Como inspiración no hago nada en especial para buscarla, sí me he dado cuenta de que cuanto más trabajo, más historias nuevas se me ocurren. Ya sabéis, eso de estar ocupada con un proyecto y aparecer en tu cabeza escenas que no vas a poder desarrollar en ese momento. De modo que las apunto, también anoto ideas, frases sueltas que escucho o se me ocurren y eso es todo. Cada vez lo voy teniendo todo más planificado, pero cuando siento que quiero hacer algo distinto y no lo que había pensado inicialmente, miro toda esa recopilación y voy desarrollando a los personajes, sus vidas, la historia que quiero contar, voy anotando los temas acerca de los que necesitaré documentarme… Eso sí, en ocasiones, una escena se instala en tu cabeza y por más que quieras, no puedes apartarla. Así que, una de dos, o la escribes o no haces nada.
¿Alguna costumbre a la hora de escribir?
Pues cada vez soy más consciente de algunas pequeñas manías. Por ejemplo, si empiezo a escribir en el ordenador de sobremesa del despacho, prefiero terminar esa historia allí, si lo hago en el portátil, lo mismo. Sí que, invariablemente de dónde escriba, me gusta tener los diccionarios abiertos (utilizo la versión online porque es la más actualizada y da acceso rápido y de forma sencilla a la información) y la documentación recopilada de la novela, mis notas y demás bien cerca. Bueno, y me preparo algo para beber, dejo todo listo para tener la mente despejada antes de empezar.
Escribes romántica, ¿qué les dirías a los que opinan que la novela romántica es un género menor?
En realidad, escribo muchos otros géneros, pero sí, lo que más publico y escribo está englobado dentro de ese gran género. Les diría que ya no es tiempo para corsés. Ha llovido mucho y hemos pasado por mucho para leer opiniones, argumentos y excusas en el siglo XXI que se repiten como una cantarella desde muchos siglos atrás. La mente abierta, la curiosidad, el respeto por el trabajo ajeno, ayudarían a muchas personas a descubrir mundos y autores apasionantes. Esta supuesta, y conveniente, pelea entre géneros o autores de dichos géneros, viene ya de la época de los juglares, imaginad si es o no antiguo el tema. Ya va siendo hora de dejar a un lado los prejuicios inculcados, eso es lo que pienso. De todas formas, permitidme añadir que, en la mayoría de las ocasiones un escritor no piensa en qué género va a escribir, simplemente lo hace; explica esa historia que su mente ha creado, hay muchas otras cosas en qué pensar y que desarrollar antes de escribir una novela, pero jamás me he planteado el género antes de escribir una línea. Es más tarde cuando surge eso, cuando el texto está comenzado normalmente o incluso después de terminarlo.
Háblanos de tus proyectos futuros.
Acerca de proyectos futuros hay mucho por contar. El 14 de Mayo salió a la venta con Selección de Ediciones B, Tras el Largo Viaje, una novela de romance actual donde podremos conocer la historia de Lili, una chica joven que ha tenido que pasar por mucho más de lo que por edad debería. Una mujer que nos mostrará los miedos, dudas y recelos que experimentará desde el momento en que toma la determinación de volver. También conoceremos su entorno y todo lo que esa decisión traerá consigo. Os invito a que la descubráis; estará disponible en las principales plataformas digitales. Por otra parte, estoy trabajando en otros muchos proyectos, unos verán la luz hacia finales de año, otros en los próximos. Ya iré anunciando fechas y demás a través de mis redes.
¿Quieres añadir algo más?
Agradezco mucho que hayáis pensado en mí para realizar una entrevista para vuestra web, es un auténtico honor y espero que vuestro proyecto como Resistencia Literaria tenga una merecida repercusión porque al fin y al cabo todos queremos contar historias, mostrar, entretener, explicar y transmitir, y eso, eso es lo bonito de esta profesión a la que se llega por pura vocación.
Muchas gracias a ti por pasar este rato con nosotros.