Mel Balaguer: «Tuve una época de escribir en cualquier sitio»


Entrevista a Mel Balaguer, autora de la novela Al final de los mares de arena.

¿Cuándo empezaste a escribir y qué te llevó a hacerlo?

Siempre he escrito, desde que tengo recuerdo. Era mi válvula de escape, escribía relatos, cartas a nadie, poemas… Tuve una época de escribir en cualquier sitio, y conservo poemas escritos en tickets, servilletas, trozos de libreta. El propio epílogo de mi libro al final de los mares de arena tiene su origen en un relato que escribí con 14 años. En aquel momento ni se me pasó por la cabeza que algún día se convertiría en una novela, pero lo rescaté y lo convertí en cuento, y de ahí, me animaron varias personas a dar un pasito más y poco a poco fue cogiendo forma hasta lo que es ahora.

Has tenido Al final de los mares de arena muchos años metida en un cajón ¿Por qué te has decidido a publicarla ahora?

PortadaHace unos 10 años que el libro está acabado y esperando a que me decida a sacarlo a la luz. Le veía sus defectillos y me decía a mi misma que había que retocar, mejorar, y nunca era perfecto. Nació mi hijo y el proyecto pasó a segundo plano y poco a poco fue perdiendo fuerza. Hace un par de años empecé otra vez a tomar las riendas de mi vida, que llevaba mucho tiempo enfocada sólo en ser mamá. Entre otras cosas empecé una formación en Terapia Gestalt y creo que eso me ha ayudado a validar mis logros y pienso que ha sido decisivo para pasar a la acción, dejar de procrastinar y mostrarme con lo que puedo ofrecer.

¿Cómo estás viviendo tu primera aventura literaria? ¿Está cumpliendo tus expectativas?

La verdad es que aun me siento un poco perdida, estaba muy emocionada cuando finalmente lo publiqué, he sentido gran acogida y me van llegando feedbacks positivos que me sorprenden gratamente. De todos modos, tras el boom inicial me doy cuenta que me faltan herramientas para darme a conocer y la parte de “venderme” es la que llevo peor. A veces me viene la impaciencia de querer ser un best seller, aunque no lo he pretendido nunca, pero en general estoy bastante contenta de cómo está yendo todo.

En tu novela tratas muchos temas sociales como la inmigración ilegal, la violencia de género, los derechos de la mujer… ¿Crees que estas realidades siempre superan a la ficción?

Cuando empecé a darle forma a la novela y estos temas empezaron a aparecer en la trama, mi gran preocupación era no ofender a nadie y traté de documentarme y de no meter la pata, y para mi fue un gran reto poder tratarlo con suficiente respeto y delicadeza. Desgraciadamente, la realidad siempre ha sido mucho más cruel que la ficción, a pesar de que la imaginación siempre tiene una base real.

¿Qué tiene Kail, tu protagonista, de Mel?

Me hice esta misma pregunta hace poco y después de desgranar su biografia y su personalidad he descubierto que tiene mucho más de lo que habría querido pretender. En cierto modo Kail ha crecido conmigo y se le han ido pegando cosas conforme iba evolucionando. Empezó como adolescente, al igual que yo, y ha madurado entre las páginas a lo largo de los años. Para alguien que sepa leer entre líneas podría descubrir datos biográficos que ni yo era consciente de haber incluido, esto confirma que la línea entre la realidad y la ficción a veces puede llegar a desvanecerse.

Tu libro es autopublicado. Aunque cada vez son más los autores que eligen esta opción, todavía hay un porcentaje importante de gente que tiene reticencias a la hora de elegir una lectura autopublicada ¿Qué opinión te merece esta forma de publicar?

La autopublicación tiene sus ventajas y sus inconvenientes, como todo. La principal ventaja es que no tienes que vender previamente tu historia. Cuando emprendí el proyecto tenía claro que quería escribir la historia para mí, sin que nadie me cuestionara el contenido. No me importaban las ventas, quería mostrar mi historia y no sentirme coaccionada por que tuviera que gustar. Para que te publiquen en una editorial sentía que tenía que venderme y ponerme a su servicio: si algo no les gustaba tendría que cambiarlo. Hacerlo por mi cuenta me daba total libertad. Autopublicar puede significar un desembolso económico, pero actualmente hay opciones como Amazon que te lo ponen muy fácil. La desventaja es que el marketing también es cosa mía y ahí si no tienes ni idea la cosa se complica. Al final todo depende del objetivo. Con esta primera aventura tuve claro que nada es inamovible, y que puedo probar otras opciones más adelante.

Háblanos de tus próximos proyectos.

Mientras la novela esperaba pacientemente en el cajón empecé un nuevo proyecto más atrevido y diferente. Hace un par de años empecé una serie de relatos de temática romántica y erótica. Pretendía explorar otro tipo de literatura más explícita, sobre todo ver si era capaz de hablar de temas que siempre habían sido tabú para mi y me sorprendió la gran acogida que tuve con los primeros textos. Tengo previsto publicar un recopilatorio, poemas y relatos. Estoy traduciendo ya que originariamente se publicaron en catalán, y la idea es que salga a la luz simultáneamente en los dos idiomas.