Laura Esquivel: «Recordar es volver al corazón»

Fotografía de Roberto Melo

Laura Esquivel presenta su último libro, Lo que yo vi, en el que nos trae una colección de memorias con la música como hilo conductor y que se puede reproducir a través de los códigos QR que lleva incluidos el libro. Esquivel ha seleccionado momentos de su vida, fotos y música; y sus recuerdos de la ciudad de México y otras ciudades y países que ha visitado.

Portada Lo que yo viLa autora mexicana, que cuenta entre sus obras con la popular trilogía de Como agua para chocolate, ha explicado que el libro surgió durante la pandemia: «Como al resto de artistas me afectó mucho porque cerraron librerías, los editores se volvieron muy cautelosos y no se atrevían a publicar. Mis proyectos personales se detuvieron, tanto la presentación de mi último libro como la preparación del musical de Como agua para chocolate… Entonces alguien me sugirió que entrara en una plataforma de crowdfunding. Esto funciona muy bien en Estados Unidos y Europa. En Méjico no funcionó tan bien a nivel económico porque no tenemos esa cultura del mecenazgo, pero sí me funcionó a nivel personal y profesional. El compromiso que tenía con los mecenas era subir un texto cada mes, y los subía en español, en inglés, en un audio en el que narraba el capítulo y también en vídeo en lenguaje de señales. No saben los mecenas lo que agradecí tener esta actividad. Con ello también quería que se reflexionara sobre que estábamos viviendo un momento histórico a nivel global. Estas no son solo mis memorias, también lo son de una comunidad, del México en el que yo nací».

Le preguntamos si describir un mundo que prácticamente ya no existe ha sido una experiencia alegre o si ha pesado más la nostalgia, y esto es lo que nos ha respondido: «Que bonita pregunta. Fue una experiencia alegre, pero confieso que a veces terminaba un capítulo y me ponía a llorar. Precisamente hay un capítulo en el que narro mi visita al mercado de la Boquería en Barcelona y mi maravilloso encuentro con una señora que vendía pescado. Me reconoció y me regaló una receta para cocinar el bacalao que era de su abuela y que todavía conservo. Se dice que recordar es volver al corazón y por eso no estaría tan de acuerdo con que es un mundo que ya no existe. Existe en mí, y cuando tú lo recuerdas le das vida nuevamente. Creo que ahora es el momento de reconectar y restablecer utopías. A partir de ahí se nos da la oportunidad de reordenarnos a todos los niveles: familiares, sociales, políticos, ambientales; y escuchar a la vida misma. No la estábamos escuchando hasta que alguien nos ha sentado y nos ha obligado a escuchar».

Esquivel insiste en señalar «la importancia de continuar persiguiendo la utopía y de no dejarse llevar por la modernidad que nos esconde tras una pantalla, sino que anima a buscar el contacto humano, así como a tener más conciencia ambiental y detener el derroche generalizado». El libro está ya en librerías.